Cautelosa acogida a histórica reforma energética de México

Con la meta de modernizar al gigante estatal Pemex y revertir la caída crónica de la producción de petróleo, México presentó una histórica propuesta de reforma energética que por primera vez abre el sector a la inversión privada, nacional y extranjera, aunque la ausencia de detalles clave generó expresiones iniciales positivas, pero cautelosas entre petroleras estadounidenses y latinoamericanas. http://bit.ly/15bRAph

Por: Alfredo Sotomayor Corresponsal de Legiscomex.com   México produce en la actualidad alrededor de 2,5 millones diarios de petróleo, un descenso significativo en relación con el techo de 3,5 millones de la década pasada, además de que importa una proporción creciente de sus necesidades de gasolinas y podría convertirse en un importador neto del crudo en los próximos años, de acuerdo con estimaciones de la Administración de Energía de EE UU. La ambiciosa propuesta del presidente Enrique Peña Nieto implica la reforma de los Artículos 27 y 28 de la Constitución Mexicana, en un tema de alta sensibilidad política en México toda vez que ha estado empapado de sensibilidades políticas e ideológicas desde la nacionalización de la industria petrolera por el presidente Lázaro Cárdenas en 1938. “El país se quedará con la renta petrolera, es decir todo el beneficio que se obtenga de la producción de petróleo y gas, después de que se pague en efectivo a las empresas por sus costos de operación y de capital, acorde con las reglas predeterminadas y transparentes”, sostuvo Peña Nieto. Pero la propuesta, que por incluir una reforma constitucional requiere el concurso de dos terceras partes del Senado y de la Cámara de Diputados de México, dividió a dos de las principales fuerzas políticas de México, al conservador Partido Acción Nacional (PAN) que la consideró insuficiente y al izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) que se opone a alterar la Carta Magna. El PAN, que presentó su propia propuesta de reforma energética, consideró que los contratos de utilidad compartida no son suficiente incentivo para el sector privado extranjero y sostuvo que se requiere ir más allá, a través de mecanismos como los contratos de producción compartida, pagos en especie y concesiones.  El PRD, en voz del ex candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas, hijo del ex presidente mexicano, expresó su oposición a la propuesta oficial, anunció una consulta popular para recolectar 1,6 millones de firmas y propuso limitar la inversión privada a petroquímica y gasoductos, así como crear un fondo de excedentes, petroleros pero sin privatizar a Pemex ni enmendar la Constitución. A nivel internacional, las primera reacciones fueron positivas pero cautelosas, conforme el sector privado aguarda primero la aprobación de la reforma y después la definición de las leyes reglamentarias, a fin de determinar si se ofrecen condiciones competitivas que hagan atractivo a México a los inversionistas estadounidenses.  El diario financiero estadounidense The Wall Street Journal sostuvo por ejemplo que la iniciativa fue vista como insuficiente para algunas empresas petroleras: esperaban la propiedad directa de campos petroleros a través de concesiones, en especial porque en opinión del rotativo México mantiene algunas de las leyes más restrictivas en materia de hidrocarburos, similares a las de Kuwait, Irak y Cuba. Para la empresa estadounidense Chevron, quien ha realizado descubrimientos de combustibles fósiles en el Golfo de México, la propuesta de reforma energética fue una buena señal para ella y para otras empresas internacionales petroleras de que el sector energético mexicano finalmente está viéndose la inversión privada, nacional y foránea. México es actualmente el tercer abastecedor de crudo por volumen al mercado estadounidense, por lo que nuevos descubrimientos petroleros en el Golfo de México podrían ofrecer a EE UU una oportunidad de adquirir mayor petróleo mexicano y reducir sus compras del crudo de países árabes o de Venezuela. La empresa Pacific Rubiales Energy Corp, el mayor de los productores independientes de Colombia, se declaró interesada en los sucesos petroleros mexicanos. “Estamos siguiendo de cerca a México. Nos hemos reunido (con la gente) de Pemex. Si las condiciones de los contratos hacen sentido, estaremos en México”, dijo a la agencia Bloomberg su presidente Ronald Pantin. La Reforma El propósito declarado de la reforma energética mexicana de convertir nuevamente a la industria petrolera el motor del crecimiento económico, al tiempo que se busca reducir las tarifas domésticas felicidades electricidad, así como el precio de las gasolinas. El plan presidencial incluye por ello varios pilares. Establece contratos de utilidad compartida, que celebra el Gobierno mexicano con Pemex y/o particulares, para Exploración y Extracción. Autoriza permisos del Gobierno de la República con Pemex y/o particulares para Refinación, Petroquímica, Transporte y Almacenamiento. Corrige el Régimen Fiscal de Pemex para que sea plenamente competitivo. Reestructura Pemex y sus subsidiarias en dos divisiones: Exploración y Producción y Transformación Industrial. Mejora las condiciones de transparencia y rendición de cuentas en Pemex. Establece una política nacional de fomento a las compras de proveedores nacionales del sector hidrocarburos. En materia de electricidad, los elementos de la reforma incluyen: Permite la participación de particulares en la generación de electricidad. El Estado mantendrá, en exclusividad, el control del Sistema Eléctrico Nacional, así como el servicio público de las redes de transmisión y distribución, a fin de garantizar el acceso de todos los productores de electricidad. Se busca fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad, mediante una mayor flexibilidad operativa y de organización, a fin de ayudar a reducir costos. Se refuerzan las facultades de planeación y control de la Secretaría de Energía y de la Comisión Reguladora de Energía. Se presenta como una reforma “verde”, a favor de la sustentabilidad, que permitirá invertir más en el desarrollo tecnológico y la adopción de fuentes de energía limpias con el entorno natural.  Promueve el uso de energías menos contaminantes y de bajo costo, como la solar, la eólica y el gas. Horizonte México tiene una reserva potencial de casi USD30.000 millones de barriles de petróleo y gas natural en el Golfo de México, de acuerdo con un reciente análisis de Citi Research. Adicionalmente, se calculan el equivalente de 13.000 millones de barriles de gas de lutitas (shale gas), un potencial energético que podría interesar a las empresas foranes que tienen la tecnología, los recursos y la experiencia para explotarlos. Como parte de las acciones para atraer el interés de los inversionistas, México planea eliminar las restricciones a las empresas registrando el valor de los contratos con la Comisión de Valores y Seguros (SEC) de EE UU, a fin de que puedan ser convertidos y reconocidos en las hojas de balance, según declaró en una entrevista con The Wall Street Journal el subsecretario de energía de México Enrique Ochoa. Citigroup consideró que la propuesta, que formaría parte de las reglamentaciones en las leyes secundarias de México, elevaría el interés en la iniciativa mexicana de crear contratos de utilidad compartida, toda vez que haría más fácil que las empresas interesadas pudieran buscar financiamiento privado. Emilio Lozoya, el director de Pemex, dijo por su parte al rotativo que Pemex abrirá una nueva compañía para explorar y producir petróleo en aguas profundas en EE UU, como parte de un ambicioso plan para revertir la crónica caída de producción del gigante petrolero mexicano. The Wall Street Journal sostuvo que la medida colocaría pro primera vez a Pemex en un sector dominado por técnicas complejas de perforación donde no tienen experiencia alguna. Pemex mantiene en la actualidad solo un proyecto de inversión compartida con la petrolera estadounidense Shell en Texas. Con este marco, el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México busca acelerar la aprobación de la reforma energética mexicana, que ya fue enviada a tres comisiones del Congreso la semana pasada, con la meta de que pueda ser sancionada antes que finalice el 2013. A pesar de la oposición del PRD, el PRI pude aprobar la reforma con el apoyo del PAN y del Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM).